Adelte, empresa de ingeniería con sede en Barcelona y dedicada al diseño y fabricación de Pasarelas de Embarque de Pasajeros (PBBs) para aeropuertos y puertos, ha sido contratada por AENA, el operador de aeropuertos español, para implementar Arcos. Este sistema operativo, compatible con todas las aeronaves comerciales, ha sido desarrollado por la empresa y permite operar las PBBs remota y autónomamente, desde las salas de Control Técnico de los aeropuertos.
El sistema operativos Arcos forma parte de un contrato a través del cual, la compañía también diseñará, fabricará e instalará 6 PBBs, 6 Unidades de Aire Pre-acondicionado (PCA), suministrará 6 unidades 400 Hz (GPU) y 14 Sistemas Visuales de Guía de Atraque (VDGS) en el Aeropuerto de Sevilla.
Dicho sistema ha sido desarrollado durante un periodo cinco años por ingenieros de la compañía. El objetivo de este sistema es reducir eficientemente el tiempo de las operaciones de atraque y desatraque bajo cualquier condición climática, consiguiendo máxima precisión mediante sistemas visuales que aportan información adicional a los operadores. Por otro lado, al centralizar las operaciones de PBBs y gestionar los picos de servicio, se reducen los costes operativos del aeropuerto.
En 2020 el sistema se probó en cuatro aerolíneas en el Aeropuerto de Sevilla con PBBs que no fueron diseñadas por Adelte, lo que demostró versatilidad del sistema para funcionar con cualquier fabricante y modelo de PBB.
La iniciativa desarrollada junto a la empresa y los proyectos en los que actualmente trabaja AENA, constituyen una baza emergente para la organización, cuyo objetivo es promover la implantación de soluciones tecnológicas que hagan más eficientes los procesos y servicios en el entorno aeroportuario.
Patxi Artiz, Director de la Unidad Aeroportuaria de la compañía, comentó: “Arcos marca un punto de inflexión en la conducción de PBBs, con un gran impacto en las operaciones aeroportuarias de todo el mundo. Es sinónimo de procedimientos altamente eficientes. Las importantes reducciones de costes operativos y del tiempo de atraque y desatraque, beneficia tanto a los pasajeros como a los operadores aeroportuarios”.
