De momento compite en un nicho de mercado que está dominado por Embraer y, en menor calibre, Bombardier, Mirsubishi y Sukhoi Civil Aircraft Corporation. La mayoría de los 278 pedidos que acumula procede de aerolíneas chinas controladas por el Estado, al que también pertenece a COMAC, y empresas de alquiler de aviones. El sistema de navegación es de Honeywell y los motores de General Electric, si bien se está poniendo a punto el Yangtze 1000 para reducir la dependencia del exterior. En todo caso, nace con una tecnología de hace treinta años y ya estaba obsoleto cuando se diseñó: los motores y al aviónica son de las aeronaves de hace un decenio y medio y no parece que vaya a conseguir la certificación fuera de China.
Esa nación necesita 6.000 aviones nuevos hasta el año 2033, según Boeing. COMAC prepara el C919 de 168 plazas, que se prevé que vuele a finales de este año y entre en servicio en 2018, dos años después de lo previsto inicialmente, y cuenta con 430 pedidos de 16 clientes. También avanza en otro de doble pasillo, el C929, de 350 plazas.Mientras tanto, un biturbohélice Avicopter (filial de AVIC) Y-12 de 19 plazas se ha vendido por primera vez en el mercado estadounidense, en concreto a Coptervision, especializada en vuelos turísticos, sobre todo al Gran Cañón, si bien 130 se utilizan ya fuera de China.