
Este sistema respaldará también las operaciones en el aeropuerto de La Serena.Se trata de una tecnología que interroga a las aeronaves en vuelo para identificarlas y recoger datos sobre su posición, velocidad y rumbo. Esta información permite a los controladores gestionar los movimientos aéreos con mayor precisión y seguridad. Está preparado para operar 24x7, los 365 días del año, y su mantenimiento se realiza de forma remota para poder monitorizar en todo momento su funcionamiento.
La compañía y la Dirección General de Aeronáutica Civil, han instalado cuatro sistemas de estas características en Chile, La Serena, Antofagasta, la región del Biobío y la Araucanía.
Más allá de estos sistemas de vigilancia, la empresa ha suministrado a la DGAC sistemas de comunicación, navegación y centros de control aeroportuarios y de terminal. Sus controladores se entrenan en simuladores de vuelo que la compañía ha instalado en la Escuela Técnica Aeronáutica y otros centros del país.