El vuelo Madrid–Newark está diseñado como una opción estratégica para mejorar el acceso a Manhattan y diversificar la operación en el mercado neoyorquino. La compañía subraya que esta tercera frecuencia diaria pretende ofrecer más flexibilidad horaria tanto al pasajero de ocio como al de negocio, así como facilitar la conexión con otros destinos a través del hub de Madrid.
Durante la temporada de verano de 2026, Iberia pondrá a la venta más de 350.000 asientos entre Madrid y Nueva York, lo que supone un incremento del 40% respecto a 2025 gracias a la nueva ruta a Newark. Esta ampliación refuerza el papel del corredor España–Estados Unidos, considerado uno de los más demandados del Atlántico, y responde al crecimiento sostenido del tráfico entre ambos países.
La operación estará servida con el Airbus A321XLR, modelo de pasillo único de largo radio del que Iberia fue aerolínea lanzadora y que se ha convertido en el avión más eficiente de su flota para rutas transatlánticas. Según la compañía, esta aeronave permite reducir el consumo de combustible hasta un 40% frente a modelos tradicionales y ofrece una cabina Airspace con iluminación LED y dos clases, Business y Turista.
El programa prevé una salida diaria del vuelo IB327 desde Madrid a Newark a las 19:35, con llegada a las 22:25 hora local. En sentido inverso, el vuelo IB328 despegará de Newark a las 23:55 para aterrizar en Madrid a las 13:20 del día siguiente, lo que facilita las conexiones con la red de medio y corto radio en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
La directora Comercial, Desarrollo de Red y Alianzas de Iberia, María Jesús López Solás, destaca la proximidad de Newark a Manhattan lo convierte en una opción especialmente atractiva para el mercado corporativo y que la diversificación entre JFK y Newark permite optimizar la operación y adaptarse mejor a la demanda.
En la actualidad, Iberia ofrece diez destinos en Estados Unidos y cerca de 2 millones de asientos anuales entre España y ese país, con una media de 150 vuelos semanales. En la temporada de invierno, la compañía opera dos vuelos diarios a Nueva York y Miami; hasta dos vuelos diarios a Boston y Puerto Rico; tres frecuencias semanales a Washington; un vuelo diario a Chicago; cuatro frecuencias semanales a Dallas Fort Worth y Orlando; y tres a Los Ángeles, mientras que San Francisco se mantiene como ruta estival, con tres vuelos semanales de mayo a septiembre.
Esta red de vuelos directos se apoya en el acuerdo de negocio conjunto que Iberia mantiene con American Airlines, British Airways y Finnair para las rutas del Atlántico norte. Gracias a esta cooperación, el grupo ofrece una conectividad amplia y diversificada en Estados Unidos, con acceso a unos 400 destinos en más de 100 países desde sus respectivos hubs.
El Plan de Vuelo 2030 contempla una inversión de 6.000 millones de euros destinada a la renovación y ampliación de la flota de largo radio, que pasará de los 48 aviones actuales a 70, así como a la digitalización del servicio y a la mejora de la experiencia de cliente. La estrategia también busca incrementar la conectividad entre Europa y América y abrir nuevas rutas en mercados de alto potencial.
En este marco, Iberia ha comenzado a desplegar cinco nuevas rutas de largo radio. El pasado 26 de octubre inició los vuelos a Orlando, única conexión directa con Madrid, con cuatro frecuencias semanales, mientras que en las próximas semanas abrirá Recife —a partir del 13 de diciembre— y Fortaleza —desde el 19 de enero—, ambas en el nordeste de Brasil y con tres vuelos semanales.
De cara al verano, la compañía sumará dos destinos adicionales en Norteamérica: Monterrey, a partir del 2 de junio, con tres frecuencias semanales, y Toronto, que se estrenará el 13 de junio con cinco vuelos a la semana. Estas aperturas, junto con la nueva frecuencia diaria a Newark, consolidan la expansión de Iberia en el mercado transatlántico con el A321XLR como protagonista.
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