No obstante ser uno de los países más caros de América por sus costos aeroportuarios, tanto para las empresas como para el pasajero, Brasil pondrá en vigencia, desde el próximo 19 de julio, tal como lo anunciáramos el año pasado, una tasa de conexión, de entre 1.5 y 3 euros, para todos aquellos que combinen vuelos en alguna terminal aéra hacia una tercera y proviniendo de otra diferente.
Aunque la tasa finalmente le será cobrada al pasajero, se hará su recaudación en las empresas aéreas, por lo cual estas han interpuesto una acción judicial para que se le aclare al viajero que se trata de una nueva tasa y no de un aumento del pasaje, debido a que ya las tasas de embarque son onerosas en teritorio brasileño, oscilando entre 12 y 20 euros por vuelo, dependiendo de su carácter nacional o internacional, y el tipo de aeropuerto utilizado. (Javier Bonilla)
